Entrevista a Ricardo Herrera
Director de la Escuela de Vela “Club el Portillo” en Tominé, Colombia.
7 de Marzo de 2011.
Por Alejandro Ospina Torres
“NAVEGAR ES GOZARSE EL VIENTO”
Hoy tenemos la oportunidad de conversar con Ricardo Herrera quien lidera una de las Escuelas de Vela mas importantes en Colombia.
Ricardo, ¿Qué es navegar?
La navegación como la describo es una pasión. Para mi navegar es un escape y una terapia, es gozarse el viento. Cuando usted está navegando esta concentrado y se olvida del resto de los problemas y del resto del planeta. Se está integrado con el agua, con el viento, y con su velero. Y tiene que ser así, o si no termina entre el agua. Contrario a otras actividades en que el viento es el factor que arruina el momento, en navegación es lo que da vida a la actividad.
Es un tema apasionante que no tiene término medio. Al que le gusta le gusta, y si se metió en el tema pues arranca a comprar su velero.
¿Cuáles son los factores que afectan la navegación a vela en Colombia?
En mi concepto personal hay varios factores que van en contra de la navegación a vela.
Uno es el miedo al agua de la gente. En las costas no hay navegación a vela.
Ni hay cultura marinera. Hay una especie de paradigma y relación con el mar en el que el sol se toma desde la sombra y el mar es para mirar de lejos. Muchos no se asolean por un concepto y creencia, de que si se asolean se vuelven negros y ellos no quieren ser negros sino blancos, por lo menos en las clases altas.
Mucha gente le tiene pavor al agua porque no saben nadar.
Pero en el interior la cosa no es que sea mejor. Yo hice un curso en la laguna y de 15 alumnos de primer semestre universitario, y había 4 que no sabían nadar. Ese miedo al agua, por no saber nadar es un factor grandísimo. Un factor común es que niños que viviendo al lado de la laguna, nunca se han acercado al agua, porque entre otras cosas se cree que es peligroso.
Otro factor por el que no se desarrolla la navegación a vela es no hay infraestructura náutica en el país. No hay grandes muelles. Aparte de los de Mamonal donde llegan los grandes cruceros, hay unos pequeños que son muy regulares. En temporada llegan 200 0 300 veleros entrando a la bahía, y paradójicamente y no hay puestos.
La bahía de Cartagena es un lugar ideal. Los españoles la tomaron y desarrollaron como sitio estratégico tanto a nivel militar ycomo naval. Tácticamente era perfecta, porque es un sitio de fondeo con agua quieta, con dos 2 entradas, de las cuales una la controlaban con cadena, que es bocachica, y la entrada grande (bocagrande), la controlaban con una muralla submarina que encallaba los barcos. Además con las murallas y fortalezas militares tenían controlada la bahía.
En Colombia hay lugares ideales, que son escenarios naturales de gran belleza y de fácil acceso.
Otro factor grandísimo son los intereses económicos que hay detrás de esto. Coldeportes no apoya deportes que no sean popularmente masivos y la vela no lo es aquí en Colombia, aunque en otros países sí. Por costos por un lado y porque lo que interesa es mover plata en otros escenarios. El fútbol mueve masas y mueve boletería, y hay rotación de plata y hay patrocinio y otras cosas. La vela es un deporte difícil de ver. Es un deporte en el que usted se sienta en la playa y ve los veleros, pero desde ahí no entiende bien que esta pasando a no ser que sepa de eso.
Si hay una regata, se necesitaría tener una infraestructura de barcos para poder llevar a la gente al mar para que la vean. O hacer como hace la Copa América de Vela, que tienen cámaras trasmitiendo desde helicópteros, e inmediatamente el espectador sabe lo que está pasando en unos salones grandes con pantallas que mantienen al público informado, además de la retransmisión por noticieros y canales de tv especializdos.
Pero la vela tiene algo interesante y es que no es un deporte que usted va solo a mirar. Usted participa como competidor pero con pocos espectadores. Los espectadores son los jueces que están en el agua, junto con los entrenadores de cada liga, y quienes están en lanchas mirando su equipo.
Dentro de la cultura colombiana en el deporte hay mucho interés económico. Da mas plata la comisión que dan los de fútbol o los de federación de ciclismo porque tiene mas gente, mas espectadores y mas afiliados, que los veleristas que somos 300 en esta represa. El aporte que se le da la vela por parte del gobierno es mínimo comparado con el aporte que le dedican al fútbol.
Otros factores secundarios que afectan son las leyes y los impuestos, por ejemplo. Usted lleva allá un barco y no paga nada. Compra un barco en EEUU, en Canadá o en Europa lo trajo y lo parquea, punto.
A diferencia con Colombia. Coldeportes sacó hace algunos años una ley para promover el deporte, en que los implementos deportivos no pagan arancel. Pero la vela esta excluida de esto. Si usted trae un barco, como un Sunfish o un Láser que es un barco olímpico, exclusivamente para deportes, que no es un barco para pasear, es super exigente, y de competencia, a esto le clavan el 30% de arancel mas el 16% de iva. Como si fuera un carro. Se ve como un artículo suntuario.
Es un mito que la navegación a vela sea costosa, aunque hay artículos costosos, pero si es un mito. Mire le pongo un ejemplo, ¿cuánto cuesta una bicicleta de ruta de las que se ven subiendo en algunos lugares de montaña hoy en día?. 10 o 15 millones de pesos puede costar una bicicleta para competencia. Eso sin contar con el uniforme, los zapatos, el casco y los demás implementos.
Yo con 7 mil dólares me traigo un Láser puesto en Colombia, que son 12 o 13 millones de pesos. El Láser no consume gasolina, solo se tiene que cambiar la vela una vez cada 2 o 3 años si quiero ser competitivo. Una vela puede durar 10 años. Los buenos navegantes usan unas velas muy especializadas para efectos de competencia. Se va deformando y va perdiendo eficiencia. Así que quien compite quiere una vela en excelentes condiciones para competir y no perder terreno con quien si tenga una vela nueva al lado suyo. Cuando los veleros son igualitos lo que hace la diferencia es la pericia de quien va al mando del velero. Son costos normales de competencia. El deporte de vela menor y sus veleros no son artículos suntuosos, son elementos deportivos de competencia con valor equivalente a muchos otros deportes.
Sobre el tema de los impuestos y la percepción distorcionada que se tiene de la vela, hicimos el lobby para que los implementos deportivos de navegación estuvieran exentos de impuestos, porque muchos otros implementos deportivos de valor similar se pueden traer sin impuestos. Es que los veleros los miran como artículos suntuarios. Se sigue viendo como un deporte elitista, lo que no es cierto. La navegación la siguen viendo como algo que no es para todo el mundo, y lo curioso de esto es que los campeones son de familias de campesinos de la región. Son hijos de los mayordomos de las fincas y son excelentes navegantes y ejemplares deportistas. Una cosa es la navegación a vela menor de carácter deportivo y competitivo, y otra el turismo y los grandes veleros.
Otro factor son las leyes y la forma en que funciona el tema del deporte en Colombia.
El deporte competitivo en Colombia funciona a través de las federaciones.
El requisito es que para que pueda existir una federación necesitamos como mínimo 5 ligas, y para que exista una liga necesitamos mínimo 3 clubes.
En un tema como el fútbol no tiene problema, es mas fácil porque tiene “miles” de clubes.
En un tema como la navegación es muy difícil. En nuestro caso con 3 clubes formamos la liga de Cundinamarca. La norma es que hay uno o dos clubes por departamentos. De esta forma la ley del deporte bloquea el surgimiento y desarrollo de estos tipos de deportes como la navegación donde hay pocos clubes. La buena intensión de la ley era canalizar recursos del estado a los deportes. Desafortunadamente usted ve la página principal de un periódico y ve el tema de fútbol ocupando las planas centrales. Hemos hecho primera página de “El Tiempo” por el espectáculo y el colorido de las velas, pero una vez al año. El fútbol sale cada 15 días. El deporte y su financiación tiene un tema recurrente que es el de los espectáculos de masas y la visualización del evento. Cuando se hizo la “Copa Brisa” había en la orilla 200 o 300 personas. Pero los empresarios y anunciantes quieren llegar a masas. Para una ciudad como Bogotá de varios millones de habitantes, ellos como anunciantes quieren llegar a un gran porcentaje. Es un tema de cifras. Aquellos deportes que no son espectáculos masivos, quedan relegados pues los afecta la falta de patrocinio y además las normas legales que entre otras cosas los encarecen.
¿Qué se necesita para que se desarrolle esta cultura de navegación?
Número uno, apoyo del estado. Que sería Coldeportes apoyando con infraestructura, como son los escenarios deportivos y los veleros. Lo otro sería que bajaran los impuestos para poder producir o traer los veleros a menor costo. Es que es absurdo que cuando un Sunfish cuesta de 3500 a 3800 dólares, puesto en Colombia a usted le cueste de 15 a 18 millones de pesos. Cuando ve usted que un velero con el que va a navegar 1 o dos veces a la semana, cuesta lo mismo que un carro, pues comienza a pensar.
Lo que hace mucha gente es que en campeonatos, las fabricas ponen los barcos, y estos veleros salen a la venta al finalizar el evento, y salen a menor costo. Hace como tres años se hizo un evento en República Dominicana, y de ahí se trajeron unos Sunfish con este método.
Los elementos de navegación para vela menor son elementos deportivos y no elementos suntuosos como lo pretende ver la aduana y el gobierno.
Hay que cambiar esa mentalidad de ver la navegación como algo suntuoso. La navegación suntuosa es la navegación que se hace en velero para irse para las islas del caribe. Pero la navegación en vela menor es netamente deportiva, porque lo que le estamos enseñando a la gente es a competir. Esa es la finalidad de la escuela, con los 5 cursos que están diseñados para aprender a navegar. El último curso es netamente competitivo, y son las regatas.
El tema de impuestos es una parte. Lo siguiente es un tema de cultura. La cultura marinera no se dió en Colombia porque se construyó todo de espaldas al mar. Hasta ahora es que ha venido cambiando algo. Por ejemplo en la Cartagena antigua la vista al mar no era tan importante. Hoy en día es otra cosa.
Es necesario enseñar a amar y respetar el mar y el océano, y el tema empieza por enseñar a los niños a nadar, y en todos los niveles socioeconómicos con oportunidades para acceder a piscinas para quienes no tengan el mar al lado.
Una estrategia que ha funcionado para desarrollar la cultura de navegación a vela, es hacer unas selectivas en los colegios donde tengan acceso a un lago o al mar, y ofrecer cursos de navegación. Es replicar el proceso que hicimos con la gente de la región, estimulandola para generar esos navegantes estrella que ya conocemos.
Por ejemplo Andrés Quintero es un deportista estrella de Coldeportes, hijo del administrador del Club Jansa de la represa de Tominé, que ahora anda por todo el mundo montado en un Láser, y su finalidad son los próximos olímpicos. Es un joven de origen campesino nacido en la región, es un atleta desarrollado con entrenadores de Coldeportes y diría que es el mejor navegante que tiene Colombia hoy en día. Si les da la oportunidad, la gente surge. El talento existe.
Los vínculos con los colegios del norte de Bogotá son importantes, porque estos están a 40 minutos de la represa. Se puede tener una tarde de navegación en los colegios como parte de las clases de deportes. Estas alianzas son posibles con los colegios y las asociaciones de padres de familias.
Otro factor es tener la oportunidad de entrar y acceder a sitios públicos para navegar. Usted puede acceder a la Escuela de El Portillo mientras esté matriculado en un curso. En el momento, no hay un sitio bueno de carácter público, donde se pueda entrar pagando el día y que ofrezca una infraestructura adecuada para navegar. Hace falta que alguien lidere este tema en relación con los terrenos, la alcaldía, la gobernación de Cundinamarca y la Empresa de Energía de Bogotá que es la dueña de la represa y la rivera de esta. Entonces, ¿cómo hago para acceder al agua de la represa si no tengo el terreno? Ahí comienzan las trabas. En Cartagena es el tema es similar, la infraestructura es precaria. El nativo de tierra bomba y el nativo pescador son personas que conviven con el agua, pero no así los citadinos de las ciudades de la costa. En Barranquilla la situación no es diferente.
¿Cómo hacen otros países donde la vela si se ha desarrollado?
Los países con mayor número de competidores y participantes, en latinoamérica, son los más grandes como es el caso de Argentina, Uruguay, Chile algo, y Perú. Brasil tiene algo pero no se mezclan mucho con el resto de Suramérica. Tienen un par de constructores de barcos de competencias buenos, pero es mas grande Argentina en Vela que Brasil.
Por ejemplo, en una competencia de Optimist, hay niños de 6 a 15 años participando en una regata de fin de semana en Buenos Aires, y son como 200 veleros. Una regata de fin de semana en Tominé, ayer fuimos en Optimist, 15 veleros. Perú tienen muy buenos navegantes. Ecuador tiene buenos navegantes y hay un solo club en Salinas que es el que lidera todo esto. En Perú está Paracas, que es muy buena pista. Pero Argentina y Uruguay son masivos en el tema de la vela.
¿A que se debe?
Inmigración Europea por un lado, y número dos las condiciones sociales.
Comparemos Argentina, que siendo un país mas pequeño que Colombia en población, pero mire los eventos deportivos como el automovilismo, el tenis, el polo, el hokey, el fútbol. Se debe en gran parte al apoyo del estado, allá le meten al deporte.
Son mas conscientes de que la gente debe hacer deporte de lo que son aquí en los gobiernos. Se ve por ejemplo en el clarín, que el 80% de noticias son deportes, deportes, deportes. Se ve que funciona.
¿Como hacer para que el mar sea importante para el colombiano?
Los grandes impulsadores que ha habido con respecto a la vela, han sido almirantes del interior, sin demeritar a nadie. Son los que han liderado esto, y es lo poco que se mueve como vela en Cartagena.
Pero es un tema de cultura básicamente, que se soluciona con educación y esto toma generaciones. Mientras usted no coja a los peladitos y les inculque que el mar hay que respetarlo pero que uno lo puede usar y lo puede gozar y puede salir a navegar, no hay ningún problema. Pero cuando se le dice al niño, que “el mar es para mirar de lejos”, es para “darle de comer a los ojos y no a los tiburones”, el niño le coge temor al mar. Estos son lemas que se escuchan. Es un temor infundado presente en la cultura.
Al mar no hay que temerle. Podemos salir a navegar con mar picado hasta cierto límite, y en estas condiciones mas se aprovecha y mas se goza, porque los navegantes lo que queremos en viento.
Yo he salido a navegar en mar de leva con Sunfish o en 420 y es la gozadera total. 25 nudos y uno volando en el velero. Usted no va a ir a meterse en la mitad del caribe, esta ahí en la bahía de Cartagena que es un escenario natural y perfecto para hacer regatas, con un tamaño ideal entre tierra bomba y castillo grande. Es una pista ideal. Aunque fuera de la bahía el mar puede estar picadísimo, al interior de la bahia de Cartagena se hacen regatas buenísimas. Hemos hecho campeonatos de Optimist con 20 o 22 nudos. Los chinos salen con las rodillas sangrando del esfuerzo físico que tienen que hacer, pero absolutamente emocionados y felices por la competencia..
Pero ¿por qué no se desarrolla la navegación a vela en la costa? Hoy en día hay un grupo que navega veleros grandes, pero la vela menor, que es por donde se debe empezar, se han hecho solo algunos esfuerzos.
¿Cuáles son las categorías de vela menor?
Hablemos de la vela menor que es por donde se empieza.
Los niños comienzan por Optimist. Tengo chinos navegando desde los 6 años hasta el año que cumple los 15. Vela menor se considera cualquier velero que no tenga quilla fija, digamos hasta unos 20 pies.
En Colombia tenemos Optimist, Sunfish, Láser, 420, Snipe, liner.
El velero Hobie es un velero escuela, es cómodo para sacar 3 o 4 personas con dos velas que son la mayor y foque, que sirven para aprender lo básico. Es igual al que fabrican en Medellín que es el J12, un velero de 12 pies.
¿En Colombia se fabrican veleros?
Si. Esta figlas que fabrica los flamingos que son parecidos al Hunter norteamericano modelo viejo anterior al 96. Se fabricaron muchos Sunfish que aquí los llamaron “pirañas”. También fabrican una especie de Optimist no muy competitivo, muy pesado.
Los veleros de competencia se traen de muchas partes:
En Brasil hay un par de fabricantes de 420 y de Láser. Argentina también esta fabricando.
Depende en que velero vaya a navegar. Si es un lightning obligatoriamente de Estados Unidos. Si es un Láser hay en Finlandeses, americanos y surafricanos también.
Los Snipe se traen de Europa, pero también los están fabricando acá con licencia europea. Los hace Cotecmar en Cartagena bajo la supervisión de los Suecos. Hace unos años hicieron unos 10 barcos superiores a los que hacen allá.
Cotecmar, el Astillero de la Armada, tiene unas instalaciones donde pueden fabricar lo que quieran. Tridimensionalmente diseñan en computador un velero y una maquina en tamaño real hace el modelo 3D, la escultura, y de ahí sacan el molde en fibra y lo producen. Todo con Diseño y Manufactura Asistida por Computador. Lo tienen muy bien montado, limpiecito, perfecto.
¿Hay infraestructura para hacer barcos?, si. ¿Se fabrican?, no. ¿Se han fabricado en el pasado?, si.
Los 420 que tenemos en El Portillo todos fueron hechos acá por Guntler, un Alemán que llego en los años 40 y fue el pionero en desarrollar la vela en Colombia. Murió hace un par de años. Esos lo fabricaban en Bogotá en la calle 19 con 17.
Después hubo una cantidad que los hizo Jorge Muso que fabricó unos 10 a 15 barcos de esos. El hacia cabinas de fibra de vidrio. Yo tenia uno de esos 420 que eran muy buenos, competitivos, que “caminaban”.
Después hicieron unos Sunfish en Medellín, que es el mismo s23 que es un crucero pequeño . También se hacen los j12.
Jose Jaramillo fabrica en Medellín unos Optimist, son de doble casco. Eso es básicamente lo que se ha hecho.
El potencial para producir veleros existe y Colombia tiene la posibilidad de producir sus propios veleros. Producir un velero no es difícil, Tiene unos estándares con unos pesos mínimos. Por ejemplo el 420 con velas, mástil y casco debe pesar mínimo 100 kilos. Si esta por debajo de eso queda por fuera de reglamento, si está por encima, pierde competitividad. Esto se necesita para ser competitivo a nivel internacional. Los producen a 100 kilos exactos. El casco pesa 80 kilos mas 20 de velas, espinaker y mástil y trapecio. El cuento esta en hacer un barco bien proporcionado en que la fibra este bien distribuida. Y es que la tecnología ya existe. Si esta por encima carga mas peso del que debe, si está por debajo lo descalifican. Debe ser competitivo a nivel internacional.
¿Cuál es la clase mas predominante en Colombia ?
La vela se divide en clases de veleros y hay muchísimas.
Aquí todas las clases hacen competencias nacionales una vez al año. Hay una distrital y hay una competencia nacional.
Se han hecho competencias internacionales como los suramericanos de Sunfish, y Optimist. Con participación de 200 veleros. Para eso traen veleros que la fabrica presta y después los devuelven. Quien los compra después de esas competencias tiene veleros perfectos como salidos de fabrica.
De las clases que mas se navegan hoy en día está el “crucero”, que es velero grande. La gente se ha dado cuenta que el velero asocia la familia, va el papa, mama, 2 o 3 hijos. Todos trabajan dentro del velero, se vuelve un plan de familia. En los últimos 5 años ha crecido muchísimo.
Cruceros que llamamos nosotros de 22 pies. Se ha traído muchos Catalinas de la florida, Catalina 22 capri y el Hunter 23 que son las dos clases predominantes en crucero en Tominé. Hay unos 15 a 17 de esas clases, de resto son esporádicos que han traído de otras clases.
Los olímpicos hoy en día tienen algunas clases vigentes y algunas otras han salido.
Colombia tiene algunos 470. Este es igualito al 420 pero 50cm mas grande, con el área de vela mucho mayor. El 470 es mucho mas rápido, es un barco exigente. Aquí fueron a algún mundial, “Andrés Lisot” hizo un muy buen papel. Se han asistido a campeonatos mundiales.
Láser y windsurf se navega a nivel muy competitivo. Estas dos ultimas son nuestras posibilidades olímpicas.
En esto ser competitivo un segundo es fundamental. En un segundo de ventaja le pueden sacar 2 metros y ganar la regata.
¿La competitividad está en la preparación o en la tecnología?
La competitividad es una combinación de tener el barco correcto, las velas correctas, la preparación física correcta. Ahí es donde se falla en Colombia, porque los navegantes se preparan el fin de semana, pues creen que no tienen digamos que esa “facilidad”, aunque aquí en Bogotá la laguna esta a 1 hora, y hay escenarios en varios departamentps que no tienen acceso al mar. El joven navegante Argentino, Uruguayo, Español, Francés que vive en la costa, sale del colegio, tira la maleta y va y navega toda la tarde, todas las tardes, y tiene un entrenador para eso. Es mas le enfocan el colegio con institutrices especiales para que el joven pueda navegar todos los días y se dedique a eso exclusivamente. Con eso se llega a los olímpicos. La navegación se convierte en una alternativa de vida y de profesión. Aquí tocamos un tema fundamental, que es hacer lo que uno ama.
La navegación como pasión, o le gusta o la detesta, no hay termino medio. A uno no medio le gusta la navegación. Uno se monta en un velero y queda, o encantado para toda la vida, o nunca se vuelve a montar en esa vaina. Yo no he visto la persona que diga, “medio me gusta” porque se montan en eso y dicen, no esto no es lo mio, o definitivamente esto si es lo mio.
Yo volaba con un instructor de vuelo,soy ingeniero aeronáutico de profesión, y este instructor era navegante. Una vez aterrizamos junto a un lago, sacó un catamarán y navegué por primera vez. Ese día, apenas me monté dije: ¡esto es lo mio! Y desde hace 30 años no me he bajado de un velero todos los fines de semana. Yo navego todos los fines de semana de mi vida.
Bogotá tiene esa ventaja, a una hora esta la represa de Tominé y ested puede navegar todos los fines de semana. Las ventajas de Tominé, son la cercanía de Bogotá. Puedo salir de mi oficina a la 1 de la tarde y llegar a las 2 a la represa y navegar hasta las 5, devolviendome y llegando a Bogotá a las 6:30pm. Para poder ser competitivos en navegación a vela, primero necesitamos darle oportunidades a la gente, para que descubra la pasión de navegar.
¿Se necesita a tener velero para navegar?
Si esta inscrito a una de las escuelas de vela existentes, no. Se puede alquilar un velero o puede tomar clases. Pero llega un momento en que pasa los 5 niveles de cursos que enseñamos y toca tomar una decisión en la vida. ¿No quiere, o Si quiere Ser Navegante?
Contrario a lo que pasa en otros países, en que los veleros pertenecen al club y no a otras personas, Aaquí los veleros pertenecen a la gente. El “Club Náutico el Portillo” tiene una flota de veleros de la escuela, y da la posibilidad a quien no lo tiene, de navegar en esos veleros. Por lo menos mientras desarrolla la destreza, pero eso es una cosa que pasa rápido. Porque finalizando el curso comienza a rondarle en la cabeza la idea de comprar el velero y afiliarse a alguno de los clubes que hay en la represa de Tominé. Usted puede comprar un velero para navegar con un par de millones de pesos y estar navegando.
Cuando la persona se compra un velero como un Sunfish, del cual hay una vez al mes regata, comienza a participar y le coge el gusto a la competencia. Luego ve las competencias de 420 y como no hay suficientes barcos, compra su 420. Y así ve que un fin de semana hay “cruceros” y me monto con esa gente, y se da cuenta que es rico tener un barco, y compra un crucero, y todos terminamos con colección y pequeña flota propia de barcos para poder competir en todo.
Hay barcos que son muy populares como el Sunfish, que hay como 60 a 80 en la laguna, así que es muy fácil pedir un barco prestado a un navegante amigo. Ya estando dentro del medio es fácil conseguir barco.
¿Cómo hacer para desarrollar esa cultura de navegación entre las nuevas generaciones? ¿Qué edad es ideal para arrancar?
Yo arranqué como a los 18 años cuando estaba en la universidad. En la Escuela de Vela estamos comenzando con niños como de 6 años. Arrancan con un curso de iniciación en J12 o el Hobi one en que se aprenden las partes del barco, navegación básica, rumbos básicos, como se llaman las velas, la orza, el timón, etc. Es aprender a llevar el barco y los rumbos.
Esto se hace en unas 16 horas en 4 fines de semana. En este curso va el instructor con usted dentro del barco. Algunos se sienten listos, otros pasan al siguiente curso. De ahí salta a un segundo curso, ya el instructor no va con usted, ya va en su barco solo, o va en pareja con otro alumno. Y se van turnando, el uno maneja velas y el otro el timón, y van en un biplaza que es un 420 o un snipe, o va en un Sunfish solo y el instructor va en una lancha corrigiéndolo. Así se aprende a navegar, porque si la embarra no hay quien le corrija dentro del barco. A las 32 horas debe estar capacitado para ir solo a donde quiera.
Los niños pasan del j12 al Optimist, de los cuales la escuela tiene como 10. Es una clase muy popular en los niños y es lo que les da el arraigo a la vela. Si uno los coge chiquitos no le cogen miedo al tema.
Tengo un caso de un niño de 12 años, que llegó al club, le dije que se montara en la lancha con el instructor y fue a ver. Una niña que estaba en clase se cansa y amarra el velero a la lancha del instructor, se baja del velero, y este chico le dice, ¿Por qué no me presta su velero? Nunca en la vida se había montado en un velero. Así que vestido tal cual como había llegado de Bogotá, obviamente se va al agua 2 o 3 veces, y le dicen como enderezarlo. La cosa es que se baja en el muelle como a las 5 de la tarde, y me dice, “Herrera, esto es lo mio”. Y usted viera la maravilla que es navegando, esta dentro del top. El cuento es que venía por un mal camino, con problemas en los colegios, los amigos, etc. La mamá me dice, “Usted le salvó la vida a ese niño”. Porque ahora lo que quiere el viernes es navegar, y lo único que piensa es competir, navegar, competir, navegar. Esas son las satisfacciones que da la vida, llevar a jóvenes por el buen camino.
La vela madura a los niños mentalmente. Por eso no se les debe iniciar antes de los 6 años. Si tienen 5 los mando de paseo a navegar. Con 6 años ya tienen la madurez mental para concentrarse. Porque cuando va solo en el barco tienen que aprender a resolver problemas. Un problema es que si entró el temporal, ¿cómo llego al muelle?. Yo tengo que controlar la nave y llevarla al muelle. Tengo que resolver el problema del mal tiempo. Si va a llover pues vamos para el muelle y tengo que controlar esa situación. Desarrollan unas destrezas fabulosas, entre estas la toma de decisiones que repercute en la madurez.
No todos los niños son así, hay niños que haciendo los cursos, llega una tormenta, se les llena el barco de agua y les da susto en ese momento. Pero los que logran vencer el susto y controlan el barco se la gozan. Con la escuela de vela es una actividad segura.
¿Cómo está trabajando la Escuela de Vela a nivel regional en Tominé y Cundinamarca?
Estamos liderando cosas bien interesantes. Con la Gobernación de Cundinamarca y Cundeportes, que es Coldeportes Cundinamarca, hemos realizado un programa que estamos buscando implementarlo de nuevo, que se llama “Patos al agua, campesinos navegantes”. Escogemos 10 niños de Sesquilé, y 10 niños de diferentes lugares alrededor de la represa, como es Tocancipá, Guatavita, Guasca y Chocontá. Esto se lidera con las alcaldías, y se escogen los niños como un premio a ser buenos estudiantes, y se les manda una tarde a la semana a navegar. La Gobernación pone una plata para transportar los muchachos con una merienda y el club pone la infraestructura náutica que son las instalaciones, los barcos, los chalecos salvavidas, los instructores y todo lo que se requiere de seguridad. Es una labor social que hacemos. Al final del curso se les hace una graduación. Si usted viera la felicidad de esos niños, es gratificante.
Pero volvemos al cuento, hay niños que no saben nadar. Yo soy de esos instructores que los saco en el barco y les digo: miren lo que va a pasar, nos vamos a voltear y el agua va a estar fría. Y eso es como un shock. Después de la tercera clase los peladitos no quieren salirse del agua, porque aprendieron que con el chaleco flotan y que pueden avanzar sin saber nadar.
De esos cursos que se vienen haciendo hace como 10 años, surgieron la mitad de los instructores actuales de la Escuela de Vela que son de Guatavita y Sesquilé, y que son los grandes navegantes que tiene Colombia hoy en día. Por ejemplo, de la familia Delgado son 4, Sergio, Dani, Javer y Delio. Dentro de esos 4 hay 3 que han campeones suramericanos, y son nacidos en Guatavita. Porque tienen el “Charco” ahí al lado y pueden navegar por la tarde. Es la oportunidad de valorar y tener este recurso al lado.
¿Qué otros escenarios de navegación hay cerca a Bogotá?
Está la represa de San Rafael que no la dejan tocar, pero que sería un ideal, es en la Calera. Tiene agua para Bogotá por lo que la tienen bien cuidada y no permiten estos deportes, aunque la vela no contamina. San Rafael podría ser un escenario fabuloso, aunque es mucho mas pequeño que Tominé. Pero para enseñar vela no se necesita algo grande.
Tominé también es agua potable, que entra por Tibitó y es parte del acueducto. La represa es de la Empresa de Energía de Bogotá, genera algo de energía para Sesquilé, pero realmente es el agregado de la sabana. Por el río Bogotá alimenta la red de Tibitó donde purifican y nutren el acueducto de Bogotá para la parte del occidente.
Tominé es una cosa grande, en la parte mas ancha tiene 6 kilómetros, frente al club son 2 kilómetros. Tominé tiene dos pistas buenas donde hay buen viento, del lado de Guatavita sopla muy bien.
La represa del Sisga lo cerró la CAR (Corporación Autónoma Regional) por algunos accidentes ya que no había mucho control náutico. Allá se navegaba tablavela.
En el Neusa se hace mas pesca, pero no se navega porque no hay infraestructura de muelles y no hay mucho viento.
La navegación inició en la represa del Muña al sur de Bogotá. Pero lo último que sé es que está contaminada, cubierta de buchón y no tiene espejos de agua, creo que la estaban limpiando. El club náutico del Muña es el mas antiguo en navegación, es el mas tradicional. El liderazgo está en El Portillo por cantidad de embarcaciones y numero de gente navegando.
En el Portillo, la Escuela de Vela es un generador de nuevos navegantes, porque los hijos de los navegantes se inician a navegar, además de la promoción que realizamos en los colegios y los convenios con universidades de la sabana de Bogotá. Mire usted que ayer en la represa, aún con el aguacero que cayó, habían 27 alumnos y 8 instructores navegando.
¿Y escenarios en la costa caribe?
La Guajira es un excelente escenario para navegar. Allá “Martin” hace una clínica de Windsurf un mes una vez al año, y es un espectáculo. Es un buen lugar para hacer un centro de vela. Hay lugares donde el viento sopla de tierra hacia fuera y hay que saber regresar. Es un escenario lindísimo donde hace muy buen viento. Potencialmente es un muy buen lugar.
En la costa caribe colombiana hay escenarios muy lindos pero no hay infraestructura.
Hay una relación directa entre la navegación competitiva a vela menor y la navegación en grandes veleros clase “crucero” como turismo. Desarrollar la navegación a vela afecta positivamente el turismo.
El potencial de turismo de veleros es enorme. Cartagena tiene una bahía con un parqueadero natural de aguas quietas ideal. Además hay muchas bahías naturales con posibilidad de vías de acceso como Cholón y Barú. La Armada con patrulleras y el Gobierno con presupuesto tienen que cuidar el corredor norte. Imagínese 25.000 barcos parqueados. Hoy llegan 300 y se nos hace una barbaridad.
Con Infraestructura me refiero a que llega en un velero de 50 pies, a cualquier puerto e el Caribe, y parquea su barco, conecta agua, conecta luz y tiene comunicaciones. El muelle tiene lavandería, restaurante, cafeterías, zonas de juegos. Y usted duerme en su barco y tiene toda la infraestructura para vivir pagando un arriendo. De ahí se desconecta y se va a siguiente muelle. Eso es lo que hacen quienes navegan por el caribe. Aquí aún no existe esa facilidad.
¿Es posible navegar a vela ríos en Colombia?
No hay condiciones para eso. En el mundo si se navegan los ríos.
En Colombia no lo veo claro. Aunque si es posible, mire el caso de Buenos Aires y la navegación que hay en el Río de la Plata.
Para quienes comienzan, ¿Es seguro navegar a vela?
La seguridad Náutica es algo que enfatizamos en la Escuela de vela El Portillo. Todo comienza con el chaleco obligatorio, que es el 80% de la seguridad abordo. Esto se complementa con el mantenimiento de los veleros que se realiza regularmente, además de la actividad constante en la represa, por lo que no se navega solo.
Nosotros tenemos lanchas de rescate listas todo el día. En solo gomones para los instructores la escuela tiene 5. Todos instructores van comunicados por celular en su estuche impermeable. En el club tenemos un jefe de puerto donde hay tablero de control de salida y llegada, donde se revisa al final del día.
Nunca hemos tenido ningún percance en la escuela, por los protocolos de seguridad que seguimos.
Una invitación para que los papas y mamas lleven a sus hijos a navegar.
La gente no sabe lo que se pierde al no probar la navegada a vela. Es una terapia de respirar aire puro, y es una oxigenación para el alma. El paisaje, el sonido del agua, el sonido del viento. Es una integración total con la naturaleza. Los invito a todos a que participen en el club Náutico en el Portillo en la Escuela de Vela. Quienes quieran ir a conocer, estamos para servirles.
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